lunes, 8 de junio de 2009

LAS RELACIONES FAMILIARES

Pasaje bíblico: Lucas 14.26: “Si alguno viene a mí y no me ama más que a su padre, a su madre, a su esposa, a sus hijos, a sus hermanos y a sus hermanas, y aun más que a sí mismo, no puede ser mi discípulo”.
Parece que nos encontramos con una contradicción bíblica. ¿Cómo comprender esta afirmación de Jesús, cuando existen tantos preceptos que se refieren a la constitución familiar apelando a la unidad? Ejemplo: “Esten sujetos unos a otros en el temor de Dios” “… y los dos serán una sola carne”, o “… para restaurar los corazones de los padres a los hijos”.
Jesús hizo también otras declaraciones sobre la familia, que dejan atónitos a los menos avisados. “Dejen que los muertos entierren a sus muertos” se lo dijo a quien recibiera su invitación y pidió tiempo para sepultar a su padre.
Jesús sabía lo que hablaba y nosotros también necesitamos conocer algunas leyes que rigen las relaciones familiares para que alcancemos la verdad sobre el tema. Innegablemente existe una relación familiar de dependencia enferma, originada en el egocentrismo de los que asumen un liderazgo autoritario hacia los demás miembros de la familia, generando reprensiones, sentimientos de culpa, asfixia de las vocaciones, desanimo, actitudes negativas y hasta varias formas de locuras.
Pero hay dos modos de cortar tales ataduras perjudiciales a la salud familiar. El primero es físico, drástico, que dejará heridas incurables (rencor, enemistades, agresiones verbales, enfermedades). El segundo medio es el propuesto por Jesús, un corte consciente de ambos lados, cada uno se tornará al mismo tiempo independiente e interdependiente, donde el dominio será sustituído por la comprensión y valorización del otro como persona; donde imperaba el miedo habrá respeto, amistad.
Muchas veces los familiares aman esa dependencia excesiva yprefieren mantener esa ligazón.
En este caso la iglesia puede ayudar sin interferir en la cuestión, sino usando la autoridad de las oraciones para el corte. Este es un asunto espiritual y debe ser tratado con seriedad para que no haya distorciones ni sufrimiento innecesario. En algunos casos es necesario hasta la salida de casa por un poco tiempo. El resultado será a veces recogido a largo plazo, no tan inmediato como desearíamos, pero, después de ese acto consciente, la palabra de Dios comienza a ser cumplida,vivida de modo espontánea, uniendo padre e hijos, hermanos yhermanas. Es agradable a los ojos de Dios “¡que hermanos vivan en unión!” Y “La paz de Dios, que excede a todo entendimiento, guardará anuestros corazones y nuestros sentimientos en Cristo Jesús”.
Oración: ¡Oh! Dios, deseo ver la posición correcta que debo tomardentro de mi familia. Quiero cortar todas las ligazones familiares distorcionadas. No acepto el autoritarismo ni la resultante reprensión; rechazo el desvelo excesivo que genera dependencia. Haz que se corte el cordón umbilical que tiene nuestra familia infeliz. Deseamos ser amigos entre nosotros, loque solamente será alcanzada por la comprensión y aplicación delos principios bíblicos revelados por la luz que viene a través del Espíritu Santo. Amén.